Pastel “leche de pájaro”, desde Rusia con amor

Hacía un montón de tiempo que no participaba en los retos de la Cocina TS, por falta de tiempo y atender a otras obligaciones, pero no podía dejar pasar el “reto viajero” de todos los años. Cada mes de julio, como viene siendo costumbre, la propuesta consiste en elaborar una receta dulce o salada, típica de algún lugar al que hayamos viajado o nos apetecería viajar bajo el hashtag #TSviajero2019. Yo he escogido este pastel de nombre tan curioso, muy típico y popular en Rusia, rememorando mi viaje a San Petersburgo y Moscú de hace un par de años. Allí lo llaman PTICH’YE MOLOKO (ПТИЧЬЕ МОЛОКО) y está delicioso. Buscando información en Internet acerca del origen de este postre, varias fuentes consultadas atribuyen el mérito a un grupo de confiteros del histórico restaurante “Praga” de Moscú, dirigidos por el jefe de pastelería Vladimir Guralnik.

Si os apetece leer la entrada de mi viaje a Moscú podéis pinchar sobre la foto 🙂

Catedral de San Basilio en Moscú

Para elaborarlo haremos una base de bizcocho, un relleno de merengue, y una cobertura de chocolate. Estos son los ingredientes necesarios:

Para el bizcocho:

• 3 Huevos
• 125 gr de harina
• 1 cucharadita de levadura en polvo
• 125 gr de azúcar
• 50 gr de cacao en polvo
• 2 cucharadas de mantequilla

Para el relleno de merengue:

• 5 claras de huevo
• 250 gr de azúcar glas
• 7 láminas de gelatina neutra
• 100 ml de agua.

Para la cobertura:

• 100 gr de chocolate
• 100 gr de mantequilla

Vamos a empezar por elaborar el bizcocho base. Para ello mezclamos primero en un bol la harina, el cacao y la cucharadita de levadura de manera uniforme. Después vamos a batir los huevos y el azúcar con varillas eléctricas, hasta conseguir una mezcla espumosa y blanquecina que casi triplique su tamaño.

Añadiremos a esta mezcla la anterior de la harina y el cacao hasta que se integren muy bien todos los ingredientes. Calentamos en el  microondas la mantequilla, y una vez licuada la añadimos también y mezclamos todo de nuevo. Forramos un molde apto para horno y vertemos la mezcla, que resultará bastante espesa, por lo que debemos extenderla bien con una espátula para conseguir que la superficie nos quede lo más uniforme posible. Horneamos a 180º, calor arriba y abajo sin ventilador, por espacio de unos 20/25 minutos (el tiempo dependerá de cada horno). Conviene que el bizcocho nos quede jugoso, así que estaremos atentos los últimos minutos, pinchando con un palillo de vez en cuando para comprobar que lo tenemos listo.

Mientras se hace el bizcocho vamos a preparar el relleno de merengue. Batimos las claras y cuando empiecen a espumar les vamos añadiendo poco a poco el azúcar glas hasta obtener un merengue líquido pero con fuerza. Lo reservaremos en la nevera al menos durante media hora. Hidratamos en un bol con agua fría las hojas de gelatina y después las deshacemos en un cazo con 100 ml de agua caliente. Transcurridos los 30 minutos sacamos el merengue de la nevera y le añadimos la gelatina, volviendo a batir de nuevo para que se integre bien. Volcamos esta mezcla sobre la base del bizcocho y reservamos en la nevera un mínimo de cuatro horas (yo lo tuve toda la noche).

Montar las claras con el azúcar glas

Añadir la gelatina disuelta

Volcar sobre la base del bizcocho

A la mañana siguiente preparé la cobertura. Calenté al baño María el chocolate y la mantequilla, esperé a que se templara un poco, coloqué la tarta sobre una rejilla y la bañé en la deliciosa crema de chocolate.

Y aquí tenéis el resultado final.

¡Suave y rico, rico rico!

Si queréis descubrir más sabrosas recetas del mundo, que han preparado mis compañeras, os dejo el enlace pinchando sobre el logo de la Cocina TS

Y si os apetece leer más sobre la maravillosa ciudad de San Petersburgo, tenéis el enlace pinchando en la foto. Espero que os guste. ¡Feliz verano resalaos!

Iglesia del Salvador de la sangre derramada en San Petersburgo

 

“Pastel leche de pájaro, desde Rusia con amor”, también está disponible en audio en ivoox

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